La Marina – Febrer 2005
DIVERSIDAD FAMILIAR
PACO CANDEL
Quienes no tienen familia, evocan cuando la tuvieron, cómo la perdieron. Incluso los que reniegan de ella, la traen a colocación en sus diatribas. No siempre la aventura familiar dio resultado, pero todavía funcionando catastróficamente, resulta una nostalgia, tanto de lo que se tuvo como de lo que no se tuvo jamás.
Hasta los animales forman familias: viven en familia, cambian y dan origen a nuevas familias de una manera esporádica o continuada y, en algunas especies, de una forma definitiva, más o menos como nosotros y, en ocasiones, mejor.
Las familias de hoy responden a una mayor diversidad que antaño. De la familia extensa se ha pasado a la nuclear: sólo padres e hijos. La última expresión familiar es la monoparental, formada por un solo individuo, a lo que la lógica responde que eso no es familia ni es nada. Tampoco lo es la compuesta por uno de sus padres, con un hijo o varios a su cargo, sobre todo si tiene que compartir el hijo o los hijos o gozar de ellos a plazos. Los matices que la sociología han inventado para designar la presente diversidad familiar, han sido inauditos.
